Algunos mandamientos para acercarte a una mujer sin ser rechazado
(Del blog de Elsy) -Totalmente de acuerdo-
1. Sé imaginativo, no comiences la conversación como todos: ¿A qué te dedicas?, ¿vienes sola? Es mejor un ¿te invito (sirvo) algo de tomar?, mientras me platicas como le haces para estar tan guapa. Yo caí con este ‘No sólo estás preciosa, tus ojos dicen que eres muy inteligente, me encantaría platicar con alguien tan interesante’.
2. No seas inseguro. No trates de llamar nuestra atención con bromas, carcajadas sonoras o siendo el bufón de tus amigos. El mensaje que envías es: necesito hacer chistes para que notes mi presencia.
3. Sé paciente. Cuando una mujer te rechace a primera instancia, no insistas. Platica con alguien más y muéstrate seguro, ella solita se acercará de vuelta.
4. No seas un yo-yo, no pases horas hablando de tus grandes aventuras. Entabla un tema de conversación y déjala opinar. La presunción es un somnífero natural.
5. Sé audaz, nos encantan los hombres que llegan, te ven, se acercan y conquistan. Es odioso que pases horas viéndonos sin moverte, nos haces preguntarnos ‘bueno, ¿qué me ve?, ¿le gusto?, ¿traigo un moco?, ¿se me ven los calzones?, ¡¿o qué?!
6. No seas un imitador casanova. Tú eres tú, no trates de parecer James Bond, no quieras caminar como Elvis, piropear como Mauricio Garcés o cantar como Luis Miguel, mucho menos repitas frases trilladas de películas como ‘I’ll be back’ mientras vas al baño en actitud de ‘Terminator’.
7. Sé amable con la gente, trata con cordialidad a los meseros, la gente de servicio y demás asistentes. Un prepotente significa algo así como ‘hombre de pene pequeño que trata de compensar su frustración maltratando’.
8. No seas fantoche. Nunca trates de ‘mostrar tu cultura’ con mal gusto, por ejemplo, mezclando idiomas sólo para hacernos saber que ‘le sabes’ al inglés y al francés, habla correctamente, estamos en Latinoamérica.
9. Sé mesurado. Si quieres acercarte, mantente sobrio. Con aliento a coladera, tambaleándote y eructando sólo conseguirás exterminar tu sex-appeal.
10. No seas barbaján. Nunca utilices frases sucias o con connotación sexual para piropear, decir algo como ‘en esa cola yo sí me formo’ sólo nos hará pensar que eres un cerdo en la cama.
11. Sé sensual. Ve directo a los ojos, mueve tus manos mientras hablas, de vez en cuando acaricia nuestra cara y manos y acércate poco a poco. Si hay música estridente, mejor, podrás hablarnos al oído mientras soplas de vez en cuando en nuestro cuello, eso nos encanta.
12. No seas infantil. Nunca, jamás nos mandes a un amigo a decirnos ‘mi amigo te quiere conocer’ ¿qué no tienes boca para hablar?
13. Sé sobresaliente. Mientras todos tus amigos están embriagándose y diciendo estupideces, tómate tiempo para acercarte a las mujeres y compartir su charla, al menos una de ellas tendrá interés en seguir pasando un buen rato contigo.
14. No seas exhibicionista. No te subas a la tarima o bailes desde tu mesa mostrando, según tú, tus mejores pasos para parecer un airoso símbolo sexual. Mucho menos si estás ebrio.
15. Sé auténtico. No te inventes diversas personalidades según la ocasión, mucho menos mientas sobre tu profesión, propiedades o gustos. Cuando menos te des cuenta no sabrás quién eres además eso de la mitomanía hace correr a cualquier mujer.
2. No seas inseguro. No trates de llamar nuestra atención con bromas, carcajadas sonoras o siendo el bufón de tus amigos. El mensaje que envías es: necesito hacer chistes para que notes mi presencia.
3. Sé paciente. Cuando una mujer te rechace a primera instancia, no insistas. Platica con alguien más y muéstrate seguro, ella solita se acercará de vuelta.
4. No seas un yo-yo, no pases horas hablando de tus grandes aventuras. Entabla un tema de conversación y déjala opinar. La presunción es un somnífero natural.
5. Sé audaz, nos encantan los hombres que llegan, te ven, se acercan y conquistan. Es odioso que pases horas viéndonos sin moverte, nos haces preguntarnos ‘bueno, ¿qué me ve?, ¿le gusto?, ¿traigo un moco?, ¿se me ven los calzones?, ¡¿o qué?!
6. No seas un imitador casanova. Tú eres tú, no trates de parecer James Bond, no quieras caminar como Elvis, piropear como Mauricio Garcés o cantar como Luis Miguel, mucho menos repitas frases trilladas de películas como ‘I’ll be back’ mientras vas al baño en actitud de ‘Terminator’.
7. Sé amable con la gente, trata con cordialidad a los meseros, la gente de servicio y demás asistentes. Un prepotente significa algo así como ‘hombre de pene pequeño que trata de compensar su frustración maltratando’.
8. No seas fantoche. Nunca trates de ‘mostrar tu cultura’ con mal gusto, por ejemplo, mezclando idiomas sólo para hacernos saber que ‘le sabes’ al inglés y al francés, habla correctamente, estamos en Latinoamérica.
9. Sé mesurado. Si quieres acercarte, mantente sobrio. Con aliento a coladera, tambaleándote y eructando sólo conseguirás exterminar tu sex-appeal.
10. No seas barbaján. Nunca utilices frases sucias o con connotación sexual para piropear, decir algo como ‘en esa cola yo sí me formo’ sólo nos hará pensar que eres un cerdo en la cama.
11. Sé sensual. Ve directo a los ojos, mueve tus manos mientras hablas, de vez en cuando acaricia nuestra cara y manos y acércate poco a poco. Si hay música estridente, mejor, podrás hablarnos al oído mientras soplas de vez en cuando en nuestro cuello, eso nos encanta.
12. No seas infantil. Nunca, jamás nos mandes a un amigo a decirnos ‘mi amigo te quiere conocer’ ¿qué no tienes boca para hablar?
13. Sé sobresaliente. Mientras todos tus amigos están embriagándose y diciendo estupideces, tómate tiempo para acercarte a las mujeres y compartir su charla, al menos una de ellas tendrá interés en seguir pasando un buen rato contigo.
14. No seas exhibicionista. No te subas a la tarima o bailes desde tu mesa mostrando, según tú, tus mejores pasos para parecer un airoso símbolo sexual. Mucho menos si estás ebrio.
15. Sé auténtico. No te inventes diversas personalidades según la ocasión, mucho menos mientas sobre tu profesión, propiedades o gustos. Cuando menos te des cuenta no sabrás quién eres además eso de la mitomanía hace correr a cualquier mujer.
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