Telarañas mentales

Necesito abrazar fuertemente mis sueños para no dejarlos ir como tantas otras veces. Porque justo cuando siento que estoy haciendo bien las cosas, de pronto algo sucede, no sé qué... pero es como si caminara en una cuerda floja.
Reconozco lo voluble que he sido estos últimos días. Pero adjudicarle la culpa a mi periodo menstrual es una razón que suena tan trillada como la democracia de mi país.
De pronto sonrío, y al instante ya estoy llorando. A veces el miedo me hace temblar y me paraliza.
Y luego, me sorprendes porque me das respuestas antes de pedírtelas. Porque me conoces perfectamente que usas el tiempo exacto para hacerlo. "Gracias pa". Compartiré la torpeza de mi error a quienes leen esto: me adelanto a lo que sigue y no disfruto lo que está. Ese es el punto, y me lo acabas de demostrar.
Reírme de mi misma sigue siendo una costumbre a la que le soy fiel.
Me falta tanto por aprender, que la mayoría de las veces me desespero. Necesito paciencia, mucha. Pero lo que más necesito es no dejar de creer en mi.
Extraño a mi gente. No me estoy quejando, lo estoy confesando. Deseo con toda el alma que estén bien. Hoy he pensado mucho en mi futuro. De repente no reconozco qué tan conveniente sea. Debo confesar tambien que en ocasiones no me gusta hacer planes a largo plazo, porque es frustrante que las circunstancias no permitan realizarlos. Es algo que tengo que enfrentar. Por el momento, creo que es mejor dejar de escribir, porque hay algunas telarañas mentales que no me dejan respirar agusto. Tal vez mañana hay algo mejor que pueda expresar. Lo sospecho.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
a veces hay q descansar para dejar al sentimiento fluir, ya despues escribir sobre el... pero luego me ondeo o resulta que no era tan reelevante... saludos nena, un abrazo =D

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